Plante Judía Perona

La judía perona es una planta comestible muy popular en la cocina mediterránea. Además de ser rica en nutrientes, esta leguminosa es fácil de cultivar y cuidar. En este artículo, te contaremos todo lo que necesitas saber sobre la planta de judía perona, sus beneficios y cómo cuidarla.

La judía perona es una planta anual que crece en forma de enredadera. Su altura puede variar de 50 a 150 cm, dependiendo de la variedad. Las hojas son compuestas y las flores son pequeñas y blancas o moradas. Los frutos son vainas alargadas que pueden medir de 15 a 30 cm de largo y contienen semillas.

Entre los beneficios de la judía perona, destacan su alto contenido en fibra, proteínas y minerales como el hierro, calcio y fósforo. También es rica en vitaminas del grupo B, especialmente en ácido fólico, importante para el correcto funcionamiento del sistema nervioso y la prevención de defectos congénitos.

Para cultivar la judía perona, es importante elegir un lugar soleado y protegido del viento. La siembra se realiza en primavera, cuando el clima es cálido y las heladas han pasado. Las semillas se deben plantar a una profundidad de 2-3 cm ya una distancia de unos 10-15 cm entre ellas. Es recomendable añadir un bono orgánico al suelo antes de la siembra.

Durante el cultivo, es importante observar periódicamente la planta para mantener el suelo húmedo. También es recomendable usar tutores para ayudar a la planta a crecer en vertical y evitar que se enrede en el suelo. La cosecha de la judía perona se realiza a los 2-3 meses de la siembra, cuando las vainas alcanzan su tamaño óptimo y están llenas de semillas.

En resumen, la judía perona es una planta muy interesante para cultivar en casa, ya que es fácil de cuidar y proporciona muchos beneficios nutricionales. Con un poco de atención y dedicación, podrás disfrutar de una deliciosa cosecha de judías frescas en tu mesa.